La Fiscalía de Bolivia imputó por terrorismo a los principales sospechosos del levantamiento militar que tuvo lugar el miércoles, el general Juan José Zúñiga y el ex comandante Juan Arnez Salvador, y ha informado que solicitará que se impongan medidas cautelares contra ambos.
Los fiscales consideran que existen indicios suficientes para presentar cargos contra Zúñiga y Arnez por los delitos de terrorismo y alzamiento armado contra la seguridad y la soberanía del Estado, mientras que desde el Gobierno insisten en ampliar estos cargos.
El propio Zúñiga, que se desplazó hasta las dependencias de la Fiscalía junto a su abogado, se ha abstenido de declarar por el momento, según informaciones del diario boliviano El Deber. Sin embargo, el general sí declaró el miércoles ante la Policía, donde dejó de hablar de “autogolpe” para referirse a la intentona como un “levantamiento armado que no se concretó por la demora y falta de coordinación de las diferentes unidades militares”.
El ex comandante Arnez decidió también guardar silencio a medida que avanzan las investigaciones, mientras que el Gobierno ha hecho hincapié en la necesidad de que sean castigados con “la pena máxima” y acusó a Zúñiga de provocar también “el deterioro de bienes del Estado y lesiones de bala contra nueve personas en la toma de la plaza Murillo”.
“La Procuraduría General y la Fiscalía General han iniciado el proceso penal y lo sacarán adelante hasta lograr la condena de este militar. Esta acción irresponsable de un militar que deshonra a las Fuerzas Armadas y a la amistad que le brindamos muchos funcionarios de este Gobierno solo muestra que es una persona irresponsable y desleal con valores básicos de respeto y dignidad de las Fuerzas Armadas”, aseveró Lima.
Las autoridades de Bolivia confirmaron en las últimas horas que ya son al menos 17 los detenidos por el intento de golpe de Estado, entre ellos Juan José Zúñiga -quien encabezó el alzamiento en la plaza- y Juan Arnez Salvador, ex comandante de la Marina, además de algunos civiles como Aníbal Aguilar, un ex viceministro de la década de 1980 que coordinaba el programa de erradicación de narcocultivos. La cifra la dio a conocer el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y agregó que aún hay una búsqueda activa sobre otros tres militares en servicio pasivo.
El jueves por la mañana, el ministro dijo que “hay una decena de militares detenidos por el intento de golpe”, algo que también replicó el embajador ante la OEA, Héctor Arce, aunque a las pocas horas ya se había actualizado la información y se habían agregado las nuevas capturas, dispuestas en un organigrama que acompañó sus palabras.
Del Castillo aseguró también que se está trabajando junto a la Fiscalía para identificar a toda la red que apoyó el episodio en la Plaza Murillo, en el centro de La Paz, aunque ya se descartó la participación de la Fuerza Aérea.
“Vamos a detener esta red antidemocrática, no vamos a descansar hasta que todos los responsables sean llevados ante la Justicia. Es momento de sacar a los golpistas de las calles y llevarlos tras las rejas”, prometió.