Científicos alertan que el cambio climático podrían hacer colapsar la Corriente del Golfo y provocar un dramático enfriamiento de Europa

En un estudio reciente, investigadores del University College de Londres publicado en la revista Nature, advierte que el cambio climático podría conducir al colapso de la Corriente del Golfo, una corriente esencial de agua cálida, lo que tendría consecuencias profundas para Europa.

Jack Wharton, investigador principal del estudio, explicó que el calentamiento global podría debilitar la Corriente del Golfo, una cinta transportadora gigante de agua a través del Atlántico Norte, lo que reduciría las temperaturas en Europa hasta 15 °C. “Si en el futuro los vientos son más débiles, como lo muestra un estudio reciente que utiliza modelos climáticos, podría significar una Corriente del Golfo más débil y una Europa más fría”, dijo Wharton.

La Corriente del Golfo transporta agua cálida desde los trópicos hacia Europa, lo que libera energía térmica a la atmósfera y mantiene un clima templado en el continente europeo. Sin embargo, un cambio significativo en estas corrientes podría alterar drásticamente el clima. Los investigadores del UCL recolectaron muestras de sedimentos de las costas de Carolina del Norte y Florida, buscando la presencia de microorganismos antiguos llamados foraminíferos, para entender mejor la sensibilidad de la Corriente del Golfo a los cambios climáticos.

El coautor del estudio, el profesor David Thornally, indicó que estos fósiles permiten registrar la densidad del agua en la que vivían al momento, lo que facilita determinar cómo fluía la Corriente del Golfo en épocas pasadas. “Descubrimos que durante la última Edad de Hielo, la Corriente del Golfo era mucho más fuerte debido a los vientos más intensos en el Atlántico Norte”, señaló Thornally.

La última Edad de Hielo, hace unos 20.000 años, cubrió gran parte del hemisferio norte con hielo. Sin embargo, los registros sugieren que una Corriente del Golfo fuerte ayudó a mantener temperaturas más cálidas en Europa. Según el Dr. Wharton, la corriente era entonces dos veces más profunda y dos veces más rápida que en la actualidad debido a los vientos del Atlántico Norte subtropical. “La Corriente del Golfo seguía transportando mucho calor hacia el norte, a pesar de que el resto del planeta era mucho más frío”, explicó Wharton.

Estudios recientes indican que el cambio climático ya está debilitando los fuertes vientos del Atlántico Norte que ayudan a impulsar la Corriente del Golfo. Thornally también señaló que la circulación global de calor depende en gran medida de estas corrientes, por lo que cualquier cambio en su fuerza puede tener amplias repercusiones climáticas. “El océano mueve enormes cantidades de calor alrededor del mundo, equivalentes a la energía de millones de centrales eléctricas”, dijo. “Cambiar la fuerza de las corrientes oceánicas puede alterar la cantidad de calor que se distribuye en cada lugar, alterando nuestro clima y, en escalas temporales más cortas, nuestro tiempo atmosférico”.

La Corriente del Golfo es solo una parte de la Circulación Meridional del Atlántico (CMA), una vasta red de corrientes que bombean agua caliente alrededor del mundo. Investigaciones anteriores sugieren que el colapso de un gran sistema de corrientes oceánicas podría provocar una disminución de la temperatura de más de 3 °C cada 10 años.

l profesor Mark Maslin, coautor del estudio, afirmó que el cambio climático podría interrumpir el “motor” que impulsa la corriente subtropical. Cuando el agua del océano se encuentra con el hielo alrededor de Groenlandia en el Atlántico Norte subpolar, se enfría rápidamente y se vuelve extremadamente densa y salada. Esto provoca que el agua se hunda, atrayendo agua caliente detrás de ella y creando un amplio patrón de circulación. Sin embargo, el derretimiento de la capa de hielo de Groenlandia podría diluir estas aguas y hacerlas menos densas, desacelerando la rotación del circuito subtropical y debilitando la Corriente del Golfo.

El colapso de la Corriente del Golfo tendría múltiples efectos devastadores en la Tierra, incluyendo un dramático enfriamiento de Europa y un incremento del nivel del mar que afectaría severamente a América del Norte. Maslin advirtió: “Paradójicamente, el calentamiento del clima podría enfriar gran parte de Europa al alterar la AMOC”.

El costo del aumento del nivel del mar también tendría un impacto negativo en el producto interno bruto (PIB) de varios países, afectando especialmente a aquellos en la costa este de Estados Unidos, como se muestra en un mapa interactivo. En caso de un debilitamiento considerable de la CMA, se producirían alteraciones en los patrones climáticos normales y sería más frecuente ver fenómenos climáticos extremos, incluyendo inundaciones, olas de calor y sequías.

Los investigadores no pueden predecir con exactitud el impacto que tendrá el cambio climático, pero los modelos actuales indican un debilitamiento de la Corriente del Golfo, que ya está afectando la agricultura y los patrones climáticos en Europa. Al igual que en la película El día después de mañana, esto también podría provocar un aumento del nivel del mar en América del Norte. Thornally concluye: “Los cambios en la AMOC también provocarán cambios en el nivel del mar alrededor del Atlántico Norte, con aumentos significativos a lo largo de la costa este de América del Norte”.

Compartir en facebook
Facebook
Compartir en twitter
Twitter
Compartir en whatsapp
WhatsApp