A mas de un año de que la cantante irlandesa, Sinead O’Connor, fuera encontrada sin vida en su departamento de Londres, en su momento se sugirio que se había tratado de un suicidio, pues la artista seguía enfrentando el duelo por la partida de su hijo, Shane Lunny, quien se había quitado la vida un año y medio antes. Sin embargo, esas versiones fueron descartadas cuando más de cinco meses después las autoridades forenses aclararon que su deceso se había debido a causas naturales. No obstante, ahora, se dio a conocer el motivo exacto del fallecimiento de la intérprete de «Nothing Compares 2 U».
El Irish Independent, el periódico más importante de Irlanda, región de la que era originaria Sinead, reveló que la cantante murió por la «exacerbación de una enfermedad pulmonar, obstructiva crónica», un «asma bronquial» y «una infección leve del tracto respiratorio inferior». El diario irlandés obtuvo una copia del certificado de defunción el fin de semana, a solo un día que se cumpliera un año del primer aniversario luctuoso de O’ Connor.
Según informó el medio, fue apenas el pasado miércoles 24 de julio, cuando el primer esposo de Sinead, el baterista John Reynolds, logró registrar el acta de defunción de la artista que fue entregado por el forense londinense Julian Morris. Estaba escribiendo música nueva Cabe destacar que Sinead siempre residió en su natal Irlanda, pero días antes de que se produjera su deceso, a principios de julio, viajó a Londres, para permanecer una temporada en su departamento, ubicado en la zona residencial de Herne Hill.
La cantante fue encontrada inconsciente minutos antes de las 11:00 horas, instantes en que las autoridades londinenses recibieron una llamada proveniente de su propiedad. Pese a que O’Connor atravesaba el duelo por la muerte de Shane (17), en enero del 2022 había compartido en sus redes sociales que estaba escribiendo música nueva y deseaba emprender una gira en 2024. La creadora de temas como «The emperor’s new clothes» dedicó un mensaje a Shane poco antes de morir, en el que destacaba que, con su muerte, se llevaba la mitad de su vida, por el gran amor incondicional que se profesaban uno al otro. «He estado viviendo como una criatura nocturna no-muerta desde entonces. Él era el amor de mi vida, la lámpara de mi alma», manifestó. «Éramos un alma en dos mitades, él fue la única persona que alguna vez me amó incondicionalmente, estoy perdida sin él», agregó.