El guitarrista de Queen, Brian May, ha revelado que sufrió un pequeño derrame cerebral que le dejó momentáneamente sin poder utilizar su brazo izquierdo. Sin embargo, el legendario músico de 77 años ha asegurado que ya está bien y ha recuperado la movilidad suficiente para volver a tocar música, según un video publicado en su sitio web el miércoles. Brian May explicó que todo ocurrió de manera repentina y que no tenía ningún control sobre su brazo, lo cual describió como “un poco aterrador”.
El reconocido músico aprovechó para agradecer a los médicos del Hospital Frimley en Surrey, quienes lo atendieron con rapidez y profesionalismo. En tono de broma, May mencionó en su video que sigue las indicaciones de los doctores, que básicamente le han recomendado no hacer nada, y comentó que no le permiten salir, conducir, subir a un avión o elevar demasiado su ritmo cardíaco.
Brian también pidió a sus seguidores que “no tuvieran lástima por él”, ya que sus redes estarían llenas de mensajes y “eso lo odia”.
Esta revelación llega casi dos semanas después de la transmisión de un documental en BBC One en el que May lidera una campaña para proteger a los tejones de la caza. En el mismo video donde habló de su salud, también se refirió al programa y destacó las reacciones positivas que ha recibido, especialmente de agricultores y defensores de la fauna.
El músico, además, reflexionó sobre las críticas que ha recibido desde las esferas más conservadoras.
“Nos han atacado muy duramente desde algunos sectores, y hay que mirar con mucho cuidado, porque la gente que más grita es, por supuesto, la que se siente más amenazada”.
El NHS (Servicio Nacional de Salud del Reino Unido) define un derrame cerebral como una condición médica grave y potencialmente mortal que ocurre cuando se corta el suministro de sangre al cerebro. Esto puede manifestarse con síntomas como debilidad o entumecimiento en un brazo, caída de un lado del rostro y problemas en el habla. El NHS también menciona una condición similar llamada ataque isquémico transitorio (TIA), conocido frecuentemente como “mini-accidente cerebrovascular”.
Este episodio de salud se suma a los desafíos médicos pasados de Brian May, quien en 2019 sufrió un ataque cardíaco. En esa ocasión, descubrió que tenía tres arterias congestionadas, lo que puso en peligro el suministro de sangre a su corazón, y tuvo que someterse a una cirugía para la colocación de tres stents.
“Fue bastante malo, y las complicaciones que vinieron después fueron bastante malas. Ha sido una gran montaña que escalar para recuperar fuerzas, pero se ha convertido en mi nueva religión, de verdad. Solo hago ejercicio, hago mi rehabilitación cardiovascular todos los días”, explicó el músico sobre cómo vivió este ataque.