Sean ‘Diddy’ Combs sufrió otro revés legal cuando un juez federal de Nueva York denegó su última solicitud de fianza en el caso de tráfico de personas que enfrenta. Esta es la tercera vez que un tribunal rechaza su petición, a pesar de los esfuerzos de su equipo legal por presentar nuevas garantías.
Vestido con un uniforme de prisión, Combs compareció ante el tribunal rodeado de familiares que lo apoyaban. Sin embargo, los argumentos de la fiscalía lograron convencer al juez de que el riesgo de fuga o de interferencia con los testigos era demasiado alto.
La fiscal Christy Slavik pintó un cuadro sombrío de Combs, describiéndolo como alguien que no puede ser confiable. Citó como prueba su comportamiento en la cárcel, donde habría violado repetidamente las reglas, se habría comunicado de manera inapropiada y habría intentado influir en los jurados potenciales. Slavik enfatizó que, a pesar de las medidas de seguridad propuestas por la defensa, no se podía garantizar que Combs cumpliera con las condiciones de la fianza.
El equipo legal de Combs, por su parte, propuso un paquete de fianza de $50 millones respaldado por su mansión de Star Island y sugirió un arresto domiciliario estricto con monitoreo electrónico. El abogado de Combs, Marc Agnifilo, aseguró que su cliente no representaba ninguna amenaza y que las medidas de seguridad propuestas eran más restrictivas que las condiciones en la cárcel.
Sin embargo, los fiscales se mostraron escépticos ante estas propuestas, argumentando que se trata de un caso grave de violencia. Como evidencia, presentaron un video que muestra a Combs agrediendo a su exnovia Cassie