Personal de Carabineros decomisó 156 unidades de dinamita y 126 unidades de detonantes eléctricos desde la mina Santa Ana, en la comuna de Curanilahue, en la Región del Biobío.
Los funcionarios policiales llegaron hasta el lugar para realizar fiscalización a raíz del paro de trabajadores, momento en que descubrieron que los explosivos se encontraban en una oficina y no estaban autorizados ni contaban con documentos legales para su manipulación.
El mayor Roberth Moraga, comisario de la 4ª Comisaría de Curanilahue, relató que «este procedimiento se origina luego de ir a verificar un paro de trabajadores de la mina Santa Ana en Curanilahue. Luego de verificar junto a un trabajador, este indica que 35 trabajadores se encuentran paralizados. Luego, se le pregunta al encargado de la instalación si posee algún tipo de explosivo y este indica de forma espontánea que efectivamente en su oficina poseía el material explosivo».
El GOPE de Carabineros concurrió al lugar con el fin de manipular los explosivos y llevarlos a Concepción con el objetivo de realizar los peritajes correspondientes.
El encargado fue aprehendido y pasará a control de detención este miércoles por infracción a la Ley de Control de Armas y Explosivos.