Se venció el tercer ultimátum del Gobierno a la empresa Enel para que restablezca los servicios eléctricos en la Región Metropolitana, sin embargo, aún hay miles de personas sin luz, siendo la comuna más afectada Conchalí con un total de 3.404 hogares, cifra que aumentó notoriamente este miércoles, ya que hasta ayer eran solo 152 las familias que no tenían suministro eléctrico. El alcalde de la comuna, René de la Vega (Ind), explicó que con la empresa «avanzó lo más que pudo» intentando cumplir con el ultimátum del Gobierno; sin embargo, esto significó que Enel «uniera los cables sin levantar postes, improvisando con los postes que tenían», por lo que hoy, que comenzaron los trabajos para levantar los postes caídos. «Hubo que cortar los cables nuevamente (es) trabajo muy provisorio que quedó de evidencia», añadió.
De esta manera, de la Vega indicó que el problema fue «la presión ejercida a Enel y los compromisos que esta empresa hizo con la comunidad». Según informó el edil de Conchalí la empresa no levantó postes, sino que «unió los cables», entonces ahora es necesario realizar los trabajos postergados, instalar los casi 100 postes que se cayeron en la comuna, para lo que habrá que cortar el suministro eléctrico nuevamente «mientras tanto están realizando ese trabajo de ese nuevo poste». «Solo han levantado un 10%, finalmente los próximos días voy a volver a tener los mismos afectado a medida que avances las obras que no fueron ejecutadas de forma correcta», recalcando que los errores fueron los compromisos de la empresa y el ultimátum del Gobierno, ya que esto forzó a que la empresa «trabajará como maestro chasquilla, como una solución parche». Advirtió que los trabajos para instalar un poste «pueden demorar desde un día a tres», por lo que reponer la totalidad podría generar que «estemos con esta problemática por varios meses». Finalmente, se refirió sobre la actuación del Gobierno, indicando que le habría gustado ver más unidad. «Cuando hay una emergencia, yo saco a todos los departamentos a la calle. Eché de menos que los ministerios se unieran para hacer esta presión. Hay centros de salud y colegios que actualmente no están funcionando», dijo, agregando que no vio «al Minsal, Mineduc, al MOP, trabajando todos en equipo con personal en las calles, porque si la empresa no da el ancho, hay que reparar y luego se le dará factura a la empresa, pero extrañamos esa presión». «Es el temor de esta nueva mano que si bien su discurso es acalorado, la mano sigue siendo blanda. Ha pasado con este Gobierno, que el discurso es muy acalorado, pero detrás de él no hay trabajo de gestión real», concluyó.