El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este lunes que el encuentro mantenido en Hanoi entre el presidente de China, Xi Jinping, y el máximo dirigente vietnamita, To Lam, buscó estudiar maneras de perjudicar a su país en el marco de la actual guerra comercial que ha desencadenado Washington.
“No culpo a China ni a Vietnam. Veo la reunión de hoy, y es maravillosa. Es una reunión encantadora, es decir, es como intentar averiguar ‘cómo perjudicamos a Estados Unidos’”, explicó a los medios en el Despacho Oval de la Casa Blanca durante un encuentro con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele.
Trump se refirió así a la reunión entre Xi y To, que tuvo lugar hoy al inicio de una gira del mandatario chino por el sudeste asiático en la que Beijing busca presentarse como socio fiable ante la acometida comercial de EEUU.
Perdimos con China durante la era (del ex presidente Joe) Biden billones de dólares en comercio, billones de dólares. Él dejó que nos desplumaran y ya no podemos hacerlo. ¿Y saben qué? No culpo a China en absoluto. No culpo al presidente Xi. Me cae bien. Yo le caigo bien”, aseguró Trump con respecto a la actual situación con Beijing, a quien ha castigado por responder a la aplicación de aranceles.
Pese a que la semana pasada suavizó su ofensiva con la mayoría de países, Trump decidió castigar al gigante asiático, que ha insistido en seguir activando represalias, de manera que actualmente las importaciones chinas soportan un 145% de aranceles estadounidenses y los envíos estadounidenses a China un 125 por ciento.
Trump evitó pronunciarse al ser preguntado por la imposición de aranceles específicos a los semiconductores, sobre los que el fin de semana dijo que anunciaría en los próximos días, pero sí insistió en que se mostrará “flexible” respecto a la posibilidad de gravar productos del gigante tecnológico Apple como teléfonos u ordenadores.
El presidente chino, Xi Jinping, pidió el lunes a Vietnam que se una a China para “oponerse conjuntamente a la intimidación”, según la agencia de noticias Xinhua, al inicio de su gira en el sudeste asiático, marcada por el impacto de los aranceles estadounidenses.
Xi busca fortalecer las relaciones comerciales regionales e intenta presentarse como un socio fiable y estable, en contraste con el presidente estadounidense Donald Trump, que lanzó una ofensiva comercial sin cuartel con nuevos aranceles, incluso contra sus socios económicos.
El presidente chino llegó el lunes a Vietnam, la primera etapa de su gira, que lo llevará también a Malasia y Camboya.
Xi, que conversó con el secretario general del Partido Comunista y líder de facto de Vietnam, To Lam, firmó 45 acuerdos de cooperación con el país vecino, entre ellos algunos relativos a cadenas de suministro, IA, patrullas marítimas conjuntas y desarrollo ferroviario.